A muchos les costará asimilar que denominaciones míticas en el automóvil experimenten un cambio tan radical, pero Ford tiene ya callo con el Mustang Mach-E. Ahora, regresa otro mito, el Capri, y cómo no, lo hace también con propulsión eléctrica, conservando el espíritu deportivo del modelo, pero en un formato mucho más práctico y racional. Es un coche basado en el también totalmente nuevo Ford Explorer eléctrico, a su vez, con arquitectura y ciertos elementos técnicos compartidos con el grupo VW, en concreto, con vehículo de propulsión eléctrica basada en la arquitectura MEB. Ford, entre otros aspectos y elementos, define ajustes de suspensión, dirección o asistentes de seguridad propios para darle a sus coches más emoción en la conducción.
El Ford Capri es ahora un práctico crossover coupé de 5 puertas
De coupé deportivo con el techo lo más bajo posible del suelo, a un crossover de cinco puertas. Del original Ford no ha dejado nada más que el nombre. El Ford Capri tiene ahora cinco puertas, cinco plazas, una longitud exterior de 4,63 metros, 1,87 m de ancho y 1,63 m de altura. Es un coche de dimensiones mayores que el Ford Explorer, muy habitable y con soluciones muy inteligentes a bordo… Si algo ha pillado Ford del efervescente mercado de eléctricos es que hay que hacer coches diferentes, y en ese sentido el Capri está en la nueva onda de la marca del óvalo azul.
Su maletero es de los más grandes de su categoría, donde encontraremos coches como el Cupra Tavascan, también de los que se apuntan a las emociones en la conducción. Anuncia 572 litros, pero en su habitáculo también encontraremos zonas de almacenamiento de gran volumen e incluso compartimentos secretos. My Private Locker es uno de ellos. Se trata de un espacio ubicado detrás del sistema multimedia que una vez que apaga el vehículo quedaría bloqueado. Sync Mode es el nuevo sistema multimedia que Ford utiliza en este coche, con un tamaño de 14,6 pulgadas, orientado en sentido vertical e inclinable para que el conductor lo pueda posicionar a su gusto, o incluso evitar algún reflejo cuando el sol incide sobre la pantalla. El cuadro de instrumentos, sin embargo, tiene inspiración VW, y por tanto, unas dimensiones algo ridículas: 5,3 pulgadas.
Dos motores, dos sistemas de tracción y dos baterías
Poco a poco, el Ford Capri irá ofreciendo una oferta mecánica, siempre eléctrica, más variada, pero de momento, se puede elegir en versión Extended Range RWD, con un único motor y tracción trasera, o Extended Range AWD, con dos motores y propulsión a las cuatro ruedas. En el primer caso, la potencia anunciada es de 286 CV, emplea baterías de 77 kWh que se pueden cargar a 135 kW, anuncia una autonomía de 627 km y una aceleración de 0 a 100 km/h en 6,4 segundos. La segunda opción mecánica tiene 340 CV, utiliza baterías de 79 kWh que se pueden cargar a 185 kW, puede cubrir 592 km y anuncia su aceleración de 5,35 segundos para alcanzar el 0 a 100 km/h. En puntos de carga rápida, las baterías necesitan entre 26 a 28 minutos para pasar del 10 al 80%.
El interior, como es normal en vehículos de una misma familia, es casi común al del Explorer, con la diferencia del volante. Ofrece cinco plazas, asientos delanteros verdaderamente envolventes, plazas traseras que se benefician de un piso prácticamente plano y un portón de carga comunicado con el habitáculo. Hay dos niveles de equipamiento, base o Capri sencillamente, o Capri Premium, y en ambos casos siempre es de serie el navegador, asientos calefactables delanteros y traseros, grupos ópticos delanteros con tecnología LED, asiento eléctrico para el conductor con masaje incorporado, o asistentes de conducción como el programador de velocidad activo, alerta de vehículo en punto ciego y reconocimiento de señales de tráfico, aunque un elemento como la bomba de calor, que puede aumentar la eficiencia del vehículo, es opcional.
El Ford Capri se pondrá a la venta próximamente con precios entre 48.094 a 51.114 euros en el caso de los Extended Range RWD de 286 CV y entre 57.383 a 60.403 euros para los Extended Range AWD de 340 CV.