Noviembre no ha podido empezar mejor para los incondicionales de Mazda. Por un lado, cada vez parece más claro que el Roadster MX-5 tendrá un sustituto a la altura de su trayectoria. Como no podría ser de otra manera, el próximo Mazda Miata será el más revolucionario de todos los tiempos, tanto en diseño como en tecnología de propulsión. Ahora, el protagonista es el SUV Mazda CX-5 y una innovadora tecnología de motores de combustión eficiente que ha captado la atención de los inversores.
Mazda apunta alto, buscando nuevos límites de eficiencia y rendimiento. Muestra de ello son los recientes motores e-Skyactiv D de seis cilindros diésel, los e-Skyactiv G de gasolina y el nuevo e-Skyactiv G de 2.0 litros con 140 CV, estrenado en el SUV Mazda CX-30 y el compacto CX-3. Ahora, en su laboratorio de innovación, Mazda trabaja en una nueva generación de propulsores de combustión con el motor Skyactiv-Z que revolucionará el rendimiento, consumo de combustible y emisiones.
Se estrenará en el futuro Mazda CX-5 con tecnología Skyactiv-Z
El SUV mediano Mazda CX-5 sigue siendo un referente en calidad, dinamismo y conducción, aunque tras ocho años en los que no ha parado de introducir actualizaciones, ya empieza a pedir un cambio de rumbo. Mazda ha revelado los primeros detalles de la próxima generación de este SUV, que llegará a partir de 2027. La nueva versión del CX-5 no solo destacará en el segmento de SUV familiares, sino que también desempeñará un papel fundamental en la transición hacia la electrificación de la marca.
A diferencia del modelo norteamericano Mazda CX-50, que incorpora tecnología híbrida desarrollada por Toyota, el Mazda CX-5 europeo contará con un sistema híbrido propio. Además del CX-5, Mazda también lanzará una nueva plataforma eléctrica basada en el concepto Arata, presentado en el Salón de Pekín junto con el EZ-6, una berlina eléctrica diseñada para sustituir al Mazda 6.
Este diseño establece las líneas maestras de los nuevos SUV, incluyendo el CX-5 y ese nuevo SUV eléctrico que competirá con el Tesla Model Y. Ambos vehículos ocuparán el mismo segmento de mercado en cuanto a dimensiones y estilo, pero no lo harán en los mismos continente, al menos inicialmente. El modelo eléctrico derivado del Arata se lanzará primero en China, mientras que en Europa mandará el Mazda CX-5 equipando motores Skyactiv-Z. La inspiración el Arata en el diseño del nuevo Mazda CX-5 hará que el nuevo SUV medio de la marca disponga de un estilo mucho más deportivo y emocional, con una marcada silueta coupé, cintura alta, cristales laterales reducidos, una inclinación pronunciada del parabrisas y un frontal audaz que reafirma el carácter distintivo de Mazda.
El secreto de la tecnología de combustión Skyactiv-Z de Mazda
Mazda está enfocada en crear motores de combustión interna más eficientes y menos contaminantes. La respuesta a este desafío es el motor Skyactiv-Z, conocido también como “Lambda One”. Esta tecnología integra elementos del sistema SPCCI (Combustión Controlada por Chispa y Compresión) que alterna modos de combustión para maximizar la eficiencia y reducir las emisiones contaminantes. Este sistema innovador permite que los motores mantengan el rendimiento dinámico de un motor de gasolina con una mayor eficiencia de combustible.
Además, Skyactiv-Z mejora el control de las condiciones de ignición para reducir la pre-ignición, un desafío común en motores de alta compresión, y permite que el motor funcione en modos de mezcla ultra pobre de aire y gasolina. A través de sensores y controladores de presión en el cilindro, Mazda ajusta el tiempo de ignición en tiempo real, logrando una combustión limpia sin comprometer la durabilidad del motor.
La tecnología Skyactiv-Z está diseñada para cumplir con las normativas ambientales en todos los mercados globales, mientras mantiene el rendimiento y el placer de conducción que caracterizan a Mazda. Con esta innovación, Mazda espera que Skyactiv-Z complemente su línea de vehículos eléctricos y responda a los futuros requisitos de regulación ambiental.