Las luces de los coches han sufrido una gran evolución desde que se comenzaron a utilizar. Los faros halógenos son los más comunes en la mayoría de los coches actuales. Pero la última evolución de este importante elemento de seguridad de los coches ha traído un cambio importante. Los faros con tecnología LED están cada vez más presentes.
De hecho, desde el pasado día 5 de mayo ya se pueden cambiar los faros halógenos por otros con tecnología LED, algo que no se podía hacer hasta el momento en estos coches más antiguos. Antes de esa fecha, era bastante complicado poder hacerlo y el coche no pasaría la ITV con ese cambio.
Ahora, ya se puede realizar este cambio y con llevar el certificado de homologación del nuevo grupo lumínico, es suficiente. Pero, ¿es buena idea realizar este cambio de grupos ópticos? ¿Cuál de ellos es méjor y puede ofrecer mayores ventajas? Vamos a verlo.
Diferencias entre halógenos y LED
- Eficiencia energética: Los faros LED ganan en este aspecto. Los diodos LED utilizan menos energía que las lámparas halógenas, así que resultan más eficientes. Por este motivo se utilizan en vehículos eléctricos, donde el ahorro de energía es fundamental. Cada vez están también más presentes en coches con motor de combustión, ya que también ahorran combustible. Por ejemplo, una luz LED de 8,5 W equivale a una lámpara halógena de 30 W.
- Durabilidad: Las luces LED alcanzan una vida útil de unas 50.000 horas. Por su parte, los faros halógenos suelen durar entre 500 y 1.000 horas, así que también son más útiles las luces LED.
- Intensidad de la luz: Los faros halógenos iluminan una distancia de 60 metros. Los faros LED alcanzan los 300 metros y por encima de ambas, están las luces que utilizan la tecnología láser. Estas últimas alcanzan hasta los 600 metros. En este caso, estas últimas son las más eficientes, aunque no suelen estar disponibles para todos los coches.
- Pureza de la luz: Los faros halógenos tienen un tipo de luz que puede provocar fatiga visual y ofrecen una buena visibilidad pero no tan buena como la que ofrecen los faros LED. Estos tienen una luz más blanca, que ayuda a mejorar la visibilidad y a disminuir la fatiga visual. Esto se representa a través de la letra “K“. La luz que emiten los faros eléctricos miden 3.000 K, mientras que las luces LED registran 6.000 K, lo que la hace más agradable para circular con ella.
- El precio: Las luces LED son más caras que las halógenas. Esto es así, aunque es verdad que los precios han ido bajando los últimos años. Un par de luces LED pueden costara partir de 50 euros, qunque las de gama alta pueden costar unos 100 euros la unidad. Las bombillas halógenas pueden costar desde unos 10 euros la unidad y a partir de la calidad y la marca, subir de precio, pero sin alcanzar esos precios.
Ante esta comparativa, podemos ver que las luces LED superan a las halógenas en varios aspectos y se convierten en una opción más adecuada, eficiente y práctica, aunque tengan un coste algo superior.