Si conduces un coche diésel, sabrás que además del combustible tienes que añadir un compuesto adicional. Este es el AdBlue, un aditivo que se añade al vehículo y que ayuda a que las emisiones contaminantes provocadas por el mismo no sean tan dañinas para el medioambiente.
Pero quizá no sepas qué es el AdBlue y lo importante que resulta para tu coche. En este artículo queremos ayudarte a conocer mejor a este aditivo y que descubras qué es, como funciona y qué problemas puede acarrear para tu coche si se agota y no lo repones.
Qué es el AdBlue
El AdBlue es un aditivo que está compuesto por agua desionizada a la que se añade una disolución de urea al 32,55. Ahora surge otra pregunta. ¿Qué es la urea? Se trata de un líquido inocuo para el medioambiente y es el responsable de que el escape de los motores diésel reduzcan las emisiones de NOx a la atmósfera. El AdBlue es un líquido incoloro, inodoro y no tiene ningún producto tóxico en su composición.
Cómo funciona el AdBlue
El AdBlue produce una reacción química que recibe el nombre de Reducción Catlítica Selectiva (RCS) y provoca que se cree una mezcla de nitrógeno y vapor de agua. La mezcla resultante resulta menos perjudicial para el medioambiente y ajusta las emisiones a la normativa Euro 6, que está en vigor desde el año 2014.
¿Dónde se almacena el AdBlue?
El AdBlue se almacena en un depósito, cuya boquilla suele estar junto al depósito de combustible. Es algo más pequeño y el tapón suele ser de color azul. Este depósito suele tener una capacidad de entre 12 y 18 litros. A la hora de repostar, se ha de llenar con una cantidad mínima de litros, que puede variar según el modelo y la marca.
Para saber cuándo hay que llenar el depósito de AdBlue, en la instrumentación se puede ver un aviso que suele señalar cuánto AdBlue queda en el depósito y cuántos kilómetros de pueden recorrer con ellos. Normalmente, se pueden recorrer entre 3.000 a 8.000 kilómetros con el depósito lleno.
¿Que ocurre si te quedas sin AdBlue?
A priori, quedarse sin AdBlue no representa ningún riesgo ni peligro para el motor ni el coche. Simplemente, dejará de realizar la reacción química y las emisiones contaminantes se dispararán. El problema lo puedes tener si se agota el AdBlue y paras el motor. En ese caso, este no volverá a arrancar hasta que se llene el depósito. No hace falta que se rellene por completo, sino que será suficiente con el mínimo que indica el mensaje del cuadro de instrumentación.
En cuanto al precio del AdBlue, este es muy inferior al del combustible. Está en torno de 0,60 euros, aunque este puede variar. En muchas estaciones de servicio hay surtidores de AdBlue, aunque también puede comprarse una botella del aditivo, que se puede utilizar para añadirlo al depósito y ganar algo de autonomía hasta que se pueda rellenar por completo.
No lo olvides, este aditivo es muy importante y aunque su falta no causa daños en el motor, sí que es indispensable para circular.