El nuevo Toyota C-HR+ Electric marca una nueva etapa en la estrategia multitecnología de la marca japonesa, que combina híbridos, híbridos enchufables, eléctricos de batería y modelos de hidrógeno en su ruta hacia la neutralidad de carbono. Este modelo no es simplemente una variante eléctrica del exitoso C-HR, sino un producto específico desarrollado sobre la plataforma e-TNGA, la misma base que sustenta al Toyota bZ4X. Esa diferencia estructural es clave para entender su posicionamiento: el C-HR+ es, en realidad, un SUV eléctrico con identidad propia, optimizado para el mercado europeo, con una dinámica de conducción más ágil, un formato más compacto y un diseño aerodinámico que busca eficiencia sin renunciar al estilo que caracteriza al C-HR.

Plataforma: e-TNGA frente a TNGA-C, y parentesco técnico con el bZ4X
La elección de la arquitectura e-TNGA sitúa al C-HR+ Electric en una categoría distinta dentro de la gama Toyota. Mientras que los C-HR híbrido (HEV) y enchufable (PHEV) continúan utilizando la base TNGA-C, adaptada a sistemas de propulsión con motor térmico, el C-HR+ se beneficia de una plataforma concebida exclusivamente para vehículos eléctricos. La e-TNGA permite integrar la batería como parte estructural del chasis, lo que aporta una mayor rigidez torsional, un centro de gravedad más bajo y una mejor distribución de pesos. Esto repercute directamente en el comportamiento dinámico, que se anuncia más neutro y preciso.
Además, la e-TNGA permite modular fácilmente configuraciones de tracción delantera (FWD) o total (AWD-i) mediante la incorporación de un segundo motor eléctrico en el eje trasero. Este enfoque modular, compartido con el bZ4X, simplifica la fabricación y el ajuste del sistema de propulsión. En el caso del C-HR+, Toyota ha optado por una puesta a punto más europea, con un tacto de dirección más directo y suspensiones revisadas para ofrecer un compromiso equilibrado entre confort y dinamismo. El resultado, según la marca, es un SUV compacto eléctrico que mantiene la agilidad del C-HR térmico, pero con una entrega de potencia más lineal y silenciosa.

Desde un punto de vista de ingeniería, el C-HR+ Electric hereda del bZ4X soluciones avanzadas de gestión térmica, tanto para la batería como para los motores eléctricos, así como un sistema de preacondicionamiento que optimiza el rendimiento y la durabilidad en condiciones climáticas adversas. El preacondicionamiento puede activarse de forma manual, programada o automáticamente al aproximarse a un punto de carga rápido, garantizando que las celdas estén a la temperatura ideal para cargar de forma eficiente incluso en invierno.
Gama, rendimiento y carga: 77 kWh para España, 224–343 CV y 10–80% en 30 minutos
La gama del Toyota C-HR+ Electric en España se estructura en torno a una batería de ion-litio de 77 kWh netos, asociada a dos configuraciones mecánicas. La versión de tracción delantera desarrolla 224 CV (165 kW) y anuncia una autonomía de hasta 609 km en ciclo combinado WLTP, cifra que lo sitúa entre los eléctricos más eficientes de su clase. Por su parte, la versión de tracción total, con un segundo motor en el eje trasero, alcanza los 343 CV (252 kW) y acelera de 0 a 100 km/h en 5,2 segundos, con una autonomía combinada de hasta 500 km WLTP.

La carga rápida en corriente continua (DC) permite recuperar del 10 al 80% de la batería en aproximadamente 30 minutos, gracias a potencias de carga de hasta 150 kW. En corriente alterna (AC), el acabado Advance equipa un cargador de 11 kW, mientras que el Spirit eleva la capacidad a 22 kW. Este último detalle refuerza el carácter más tecnológico y prestacional del acabado superior, orientado a quienes buscan la máxima versatilidad de uso. Además, incorpora un sistema de frenada regenerativa ajustable en cuatro niveles mediante levas en el volante, permitiendo modular la retención en función de la conducción o el entorno urbano.
En términos de sensaciones, Toyota afirma que el C-HR+ ofrecerá una conducción más directa y precisa que el bZ4X, con un tarado de dirección y suspensión afinados para las carreteras europeas. La rigidez adicional de la estructura e-TNGA y el bajo centro de gravedad derivado del emplazamiento de la batería son factores decisivos para lograr ese equilibrio entre estabilidad y confort que históricamente ha definido a la gama C-HR.
El diseño exterior representa una evolución clara del lenguaje estilístico del C-HR, pero con un tratamiento más aerodinámico. Su frontal cerrado, los faros LED afilados y una silueta tipo coupé más fluida reducen el coeficiente de resistencia a 0,26, uno de los más bajos en su segmento. Las llantas de hasta 20 pulgadas y la opción bitono en el acabado Spirit refuerzan su carácter deportivo.

Interior, tecnología y conectividad: confort sostenible y seguridad avanzada
El habitáculo del Toyota C-HR+ Electric está diseñado para combinar ergonomía y tecnología con un enfoque sostenible. Los materiales reciclados (como el PET empleado en tapicerías y revestimientos) y las opciones de tapizado en cuero sintético o ante sintético subrayan la apuesta por la sostenibilidad. El maletero ofrece 416 litros de capacidad, y el techo panorámico, la iluminación ambiental de 64 colores y la climatización por bomba de calor completan un entorno moderno y confortable.
El cuadro de instrumentos digital de 7 pulgadas y la gran pantalla multimedia de 14 pulgadas (con conectividad inalámbrica Android Auto y Apple CarPlay) presiden un salpicadero orientado al conductor. En el acabado Spirit, el sistema de sonido JBL Premium de 800 W con subwoofer de 9 pulgadas aporta un toque de refinamiento adicional.
En materia de seguridad, el Toyota C-HR+ Electric integra la última generación del paquete Toyota Safety Sense, con sistemas como el control de crucero adaptativo, el asistente de mantenimiento de carril, la alerta de tráfico cruzado delantero y la cámara 360º. La función de Asistencia de Salida Segura, que impide abrir las puertas si detecta vehículos o ciclistas aproximándose, es uno de los nuevos elementos destacados.

Comercialización, precios y lectura estratégica
El Toyota C-HR+ Electric ya admite pedidos en la red de concesionarios españoles, con precios desde 36.500 € para el acabado Advance (FWD, 224 CV) y 44.000 € para el Spirit (AWD-i, 343 CV). A través del programa Toyota Easy Plus, puede adquirirse desde 250 €/mes, incluyendo 4 años de garantía y mantenimiento. Las primeras entregas se producirán durante el primer trimestre de 2026.
Como parte de su estrategia de ecosistema eléctrico, Toyota ha sellado un acuerdo con Repsol para ofrecer puntos de recarga domésticos desde 1.995 €, con tarifas eléctricas ventajosas y saldo en la aplicación Waylet. Esta colaboración refuerza el posicionamiento del C-HR+ como un vehículo eléctrico adaptado a las necesidades de uso real en el mercado español.

En clave de estrategia de producto, el C-HR+ Electric consolida el enfoque de Toyota en su transición hacia el vehículo eléctrico sin abandonar las tecnologías intermedias que han cimentado su éxito. El fabricante japonés refuerza así su portafolio europeo con un modelo eléctrico concebido sobre una base específica —e-TNGA—, a diferencia de los C-HR híbrido e híbrido enchufable, que continúan sobre TNGA-C. La coexistencia de estas tres alternativas dentro de una misma gama no es casual: responde a una lectura pragmática del mercado europeo, que combina una adopción progresiva del BEV con una demanda aún sólida de sistemas híbridos.
En definitiva, el Toyota C-HR+ Electric se perfila como una evolución natural dentro de la estrategia de electrificación de Toyota, pero también como una declaración de intenciones: un SUV eléctrico de concepción global y ejecución europea, capaz de rivalizar con los mejores del segmento no solo por eficiencia, sino también por calidad de rodadura, integración tecnológica y coherencia industrial. El C-HR+ no es un C-HR electrificado, es un nuevo Toyota eléctrico con el apellido de uno de sus mayores éxitos comerciales.

