Los coches de segunda mano son una buena opción para tener un primer vehículo o incluso un coche más nuevo que el que se tiene en ese momento. El mercado de coches de ocasión y de segunda mano es cada vez más importante y los coches que se encuentran en el mismo tienen una mayor calidad.
El hecho de comprar un coche de segunda mano era motivo de desconfianza hasta unos pocos años, pero hoy está mucho más regulado y se pueden encontrar vehículo de mucha calidad a un precio muy rebajado. La presencia de concesionarios especializados en coches de ocasión ayuda a que la elección sea más sencilla y se pueda elegir el más adecuado.
¿Compra a un particular o a una empresa especializada?
Desde luego, sigue existiendo la posibilidad de comprar a un particular. Pero en este caso, hay que tener en cuenta varias cuestiones que pueden hacer que la experiencia de compra sea muy distinta a lo que se espera. Un coche que llega desde un particular puede esconder problemas que no se ven a simple vista y que pueden provocar que haya algún problema serio.
Y esto no suele ser por mala fe, sino porque no se ha sometido a una revisión completa y detallada por parte de un mecánico profesional. No solo hay problemas derivados de la mecánica, ya que el coche puede tener algún accidente oculto que haya afectado no solo a la mecánica, sino también a la carrocería.
Otro punto importante es conocer bien el historial del coche, para saber si hay algún cargo sobre el mismo o si existe alguna sanción pendiente de pago. Todo ello se puede averiguar a través de una consulta a la DGT. Pero aunque es un trámite fácil, puede conllevar algo de tiempo y algún coste añadido a la compra.
Para evitar cualquier riesgo de estas características, es mejor comprar un coche en un concesionario de coches de segunda mano o de ocasión. En estos establecimientos se puede confiar en que el coche ha sido revisado y que no tiene ninguna sorpresa oculta. Por regla general, los coches que salen de un concesionario de coches de ocasión o de segunda mano han sido revisados tanto a nivel mecánico como a nivel documental, por lo que es más seguro.
Precio y financiación
El precio puede ser superior en un concesionario, pero es importante saber que el comprador puede estar más seguro de que todo está correcto y que no encontrará sorpresas. Y, en caso de encontrarlas, le ampara una garantía que obliga al concesionario que ha vendido el coche a cubrir los gastos surgidos.
Otro punto a favor de comprar un coche en un concesionario de coches de segunda mano o de ocasión es la posibilidad de financiar la compra del vehículo. Algo que puede resultar muy atractivo y que puede decantar la balanza hacia la compra en el concesionario.